Hasta la Seremi de Educación llegó el alcalde de Ercilla, José Vilugrón, junto a la directora del Liceo Alonso de Ercilla, Victoria Amigo y la presidenta del Centro de Padres, Sandra Valdebenito, entre otros, para dar el vamos a la firma de convenio que compromete los recursos para la reposición del establecimiento.
La madrugada del 13 de marzo de 2016 un incendio destruyó las salas de clase ubicadas en uno de los pabellones del establecimiento, resultando siete aulas siniestradas, las que eran ocupadas por los cursos de sexto básico a tercero medio, además de la sala de los alumnos de integración (PIE).
El balance tras el siniestro determinó que un 30% del liceo resultó destruido, principalmente en la estructura de su techumbre, pisos de aulas, además de equipos, mobiliario, textos y útiles escolares que se mantenían en las salas de clases.
“Desde que asumimos el gobierno, este fue uno de nuestros grandes compromisos: lograr que los niños de este liceo pudieran estudiar en condiciones óptimas, ya que por más de dos años han estado en condiciones de absoluta precariedad, y aun así el cumplimiento pedagógico de los docentes y alumnos es de gran nivel”, dijo la seremi den Educación, Alicia Bahamondes, a propósito de los resultados obtenidos por sus estudiantes en la prueba Simce, donde fueron reconocidos como uno de los mejores establecimientos a nivel regional.
El liceo Alonso de Ercilla, de dependencia municipal, está ubicado dentro del radio urbano, posee una oferta educativa desde prebásica a 4° medio Científico Humanista, siendo el único establecimiento municipal con esas características en la comuna.
Su matrícula 2018 es de 369 alumnos en Jornada Escolar Completa, resultando afectados con el incendio en promedio 200 alumnos.
El proyecto considera la reposición de siete aulas, seis de las cuales serán destinadas para la realización de clases y una sala donde funcionará el Centro de Recursos para el Aprendizaje, dentro de una superficie de 544 metros cuadrados, con un monto de inversión que alcanzará los casi $595 millones, mejorando los espacios para el desarrollo de los aprendizajes de los estudiantes.