Una dramática situación atraviesan más de 100 familias pertenecientes a la comunidad mapuche Entuco, ubicada en el kilómetro 3,5 de la ruta que une Padre Las Casas con Huichahue.
La consejera regional, Ana María Soto, denunció que los comuneros enfrentan una situación de emergencia, explicando que cuando se construyó el Bypass, a comienzos de la década del 2000, el Ministerio de Obras Públicas acordó que a manera de compensación a la comunidad, se financiaría la construcción de un pozo para riego en el sector.
La obra se desarrolló en la propiedad de uno de los comuneros, quien ofreció en comodato una pequeña parte de su terreno para que se construyera el pozo, el que hasta noviembre de 2018 abasteció a toda la comunidad, la que por falta de otra fuente del vital elemento, lo utilizaba no para regar, sino derechamente para el consumo humano.
Sin embargo, a fines de noviembre último y tras finalizar el comodato, los comuneros alertaron que el propietario del terreno les está solicitando un pago mensual para que puedan utilizar agua para beber, por lo que la comunidad quedó totalmente desprovista de acceso al agua, lo que ha generado graves problemas, el más importante de ellos es el no contar con abastecimiento ni siquiera para cocinar o lavarse.
Ana María Soto precisó que desde la última Navidad, el corte de suministro ha sido total, por lo que han gestionado una serie de reuniones con organismos públicos relacionados con el agua, pero hasta ahora no han logrado que se solucione la situación, ni siquiera en forma provisoria, por lo que llamó a las autoridades a que tomen acciones concretas en forma urgente, ya que se está viviendo una emergencia sanitaria en todo el lugar.
“¿SERÁ NECESARIO EJERCER LA VIOLENCIA PARA QUE NOS ESCUCHEN?”
Los residentes del sector tampoco cuentan con servicio de camiones aljibe y Pablo Gajardo, uno de los comuneros afectados, manifestó que sus propios dirigentes también han sostenido reuniones con diversos servicios públicos para dar cuenta de la grave situación, sin que ninguno de ellos haya resuelto su problema.
“Somos una comunidad pacífica, no somos mapuches violentos, pero me hago la pregunta: ¿Será necesario ejercer la violencia? ¿Será necesario salir a la calles a detener el tránsito, quemar neumáticos o derribar postes y árboles para que alguien nos escuche? No queremos eso. Lo único que necesitamos es una subvención para instalar las cañerías y habilitar un pozo”, afirmó el comunero.
Gajardo agregó que también han solicitado a las autoridades que envíen camiones aljibe para abastecer de agua para consumo humano, pero tampoco han sido escuchados, subrayando que por el sector corre un canal y en su desesperación, algunas personas han debido extraerle agua que no es potable, la que utilizan para beber y darle a los animales.