Un equipo de semáforos de última generación se instaló en el cruce de las avenidas General Oscar Bonilla con Nueva Rancagua, con la finalidad de controlar el tráfico que circula por esta importante intersección de Angol que ahora antecede al recién construido hospital Mauricio Heyermann, recinto que estaría abriendo sus puertas al público en pocos meses.
El equipo fue encendido este miércoles al mediodía, siendo puesto en marcha por el alcalde Enrique Neira.
Según informó el municipio, se trata de un dispositivo de última generación capaz incluso, de detectar los flujos de vehículos en las arterias viales que confluyen en el mencionado cruce, para así privilegiar el paso al sentido más congestionado, agilizando el tráfico.
El supervisor de obras de la empresa Automática y Regulación S.A., Felipe González, explicó que se trata de un semáforo de tres tiempos o fases que puede manejar demanda por espira o botonera, que es un sistema de detección de paso de vehículos y que se activa cuando es necesario encender una luz verde de un lado específico del cruce, donde pudiera circunstancialmente concentrarse mayor número de autos.
Asimismo, cuenta con un sistema de autonomía a través de un proveedor UPS que permite mantener el funcionamiento hasta por cinco horas, cuando se produce un corte de energía eléctrica.
El alcalde destacó que con esta medida se “está dando respuesta a un tema de congestión vehicular muy grande que tenemos en la comuna; ahora tenemos un semáforo de última tecnología y generación, lo que más nos ha llamado la atención es el sistema de espira, lo otro es que puede continuar trabajando en un eventual corte de luz. De tal manera que con este proyecto estamos dando satisfacción a una gran cantidad de conductores que utiliza esta vía tanto para llegar a Angol como para usar otras arterias que tenemos cercanas”.