Los adolescentes del Centro de Justicia Juvenil de Cholchol expusieron sus trabajos de artesanía, en el marco de talleres ejecutados por el Programa de Apoyo Socioeducativo, colaborador del Servicio Nacional de Menores, donde desarrollaron habilidades motoras, sociales, afectivas y de pensamiento lógico, a través del desarrollo de modelos de negocio para su comercialización.
La iniciativa se realizó en coordinación con el Servicio Nacional de Menores y la carrera de Psicopedagogía del Instituto Aiep, cuyos estudiantes tuvieron la misión de ejecutar los talleres realizados en el período de verano en cada una de las casas del recinto de justicia juvenil.
Para el psicopedagogo Juan Pablo Garrido, jefe técnico del programa de apoyo socioeconómico, ASE, de la Fundación Creseres, la iniciativa buscó fortalecer indirectamente la formación en matemática, pues “tuvieron que desarrollar modelos básicos de negocio donde tenían que valorar costos de producción de sus artesanías, considerando la materia prima, herramientas, gastos fijos y valoración de la mano de obra, entre otros indicadores; a la vez trabajaron la motricidad, atención y concentración”.
La directora del Sename en La Araucanía, Claudia De La Hoz Carmona, el trabajo con los adolescentes que se encuentran en centros de justicia juvenil es complejo, cuyo avance es lento y por micrologros: “Valoramos los pequeños avances, a partir de la adherencia a las actividades, la concentración que logran, el tiempo que entregan, el orden, la disciplina para enfrentar el trabajo y la sensación que les genera un producto elaborado por ellos”.
La aplicación de metodologías similares seguirá desarrollándose con los adolescentes, buscando mejorar su autoestima, de modo tal que cuenten con habilidades blandas para asumir sus propias vidas, reinsertos socialmente.