Escribe: Pía Bersezio Norambuena, seremi de Gobierno de La Araucanía.
El 11 de marzo conmemoramos 30 años del retorno a la democracia en nuestro país, desde ese entonces hemos tenido grande éxitos, pero también deudas pendientes con todos los chilenos. Han sido años intensos, donde cada gobierno de turno ha enfrentado diversas situaciones.
Hoy, como gobierno nos ha tocado cambiar la mirada y detenernos para escuchar a la ciudadanía, y hacernos cargo, dando la cara y entregando respuestas a las demandas requeridas que se vienen arrastrando por años.
El proceso que estamos viviendo como país es una gran oportunidad para cambiar las desigualdades que han generado tantas injusticias, por eso estamos haciéndonos cargo y realizando un mea culpa de las deudas pendientes, como por ejemplo, el descuido de nuestro niños más vulnerables y adultos mayores, de hacernos cargo de las carencias y temores de las familias chilenas, de no combatir con suficiente voluntad los abusos contra algunos, y los privilegios de otros, donde claramente no prestamos atención al debilitamiento de nuestras instituciones ni al creciente divorcio entre la ciudadanía y la política.
Sin duda esto y otros tantos temas más deben permitirnos avanzar y no retroceder en estos 30 años que llevamos de democracia, para eso, todos son importantes para poder llevar a cabo los cambios necesarios para mejorar la calidad de vida las familias chilenas.
Conversando y escuchando podemos lograr eso que todos anhelamos, todas las opiniones son válidas, con respeto y empatía. Que la violencia no sea la vía para poder concretar acuerdos.
Si la democracia de nuestro país, fue un ejemplo para el mundo hace 30 años, que este proceso que estamos viviendo sea también un ejemplo de que como ciudadanos supimos salir adelante y haciendo de Chile un mejor país.