Tras lamentar el ataque con arma de fuego sufrido por el sargento segundo de Carabineros, Óscar Garrido, la senadora (independiente pro RN), Carmen Gloria Aravena, solicitó al Gobierno intensificar patrullajes mixtos con presencia militar en zonas de conflicto, de manera de dar frente a los ataques terroristas y tomas ilegales que se producen a diario en La Araucanía.
“Nuevamente tenemos que lamentar un carabinero herido por el terrorismo en La Araucanía; las barricadas, ataques incendiarios y tomas ilegales son pan de cada día. Carabineros ya no da abasto, el terrorismo está desatado. Pedimos al Gobierno intensificar los patrullajes mixtos en la zona, puesto que el conflicto se ha trasladado desde comunas como Collipulli y Ercilla en Malleco a otros sectores en Lautaro, Loncoche y Nueva Imperial, en la provincia de Cautín”, sostuvo Aravena.
Asimismo, la parlamentaria solicitó a su pares del Senado poder acelerar modificaciones legales que permitirán que Carabineros cuenten con más herramientas y atribuciones a la hora de enfrentar situaciones de violencia en la región, tales como, la modificación a la ley de usurpación, de manera que este delito pueda ser castigado con penas privativas de libertad.
“En la Comisión de Seguridad del Senado Carabineros dio a conocer los problemas que tienen a diario para enfrentar situaciones de tomas e intentos de tomas ilegales en predios en La Araucanía, esto porque la actual normativa establece sólo una multa para el delito de usurpación, pudiendo realizar la detención de los implicados sólo cuando se generan otros delitos. A diario se producen entre dos a tres desalojos en nuestra región y eso que no todos los casos de tomas ilegales terminan en ese paso, por lo que funcionarios de unidades de orden público están en constante riesgo de vida”, añadió.
Finalmente, la parlamentaria recordó que sólo un par de días antes, el fundo Miraflores de Lautaro ya había sido atacado, ocasión en que la dueña del lugar fue amedrentada y encañonada para que saliera de la casa patronal, la cual posteriormente fue incendiada. Por esta razón, el lugar contaba con vigilancia policial y se acudió al desalojo de quienes intentaban tomarse ilegalmente el predio.