Como una oportunidad para retomar el proceso de recuperación de los aprendizajes calificó la seremi de Educación en La Araucanía, María Isabel Mariñanco, el retorno a clases el próximo lunes 25 de julio, fecha que marca además el término de la flexibilidad horaria en los establecimientos educacionales.
Actualmente hay condiciones y capacidades instaladas en las propias comunidades educativas para promover la necesaria seguridad sanitaria, pero resguardando la presencialidad de la enseñanza, que ha demostrado ser tan fundamental para el desarrollo integral de niños, niñas y adolescentes, dijo Mariñanco.
“Existe ya un amplio consenso en que la presencialidad es fundamental para recuperar aprendizajes y, sobre todo, para apoyar la formación socioemocional de los estudiantes y garantizar su derecho a la educación. Sin embargo, a nivel regional sabemos que hay situaciones especiales en comunas cordilleranas las que estamos monitoreando”, sostuvo la autoridad ministerial.
A nivel regional, las comunas de Lonquimay y Curarrehue, derivado de la condición climática se encuentran evaluando un aplazamiento en el inicio de clases, situación que -según precisó la Seremi- se mantiene en permanente monitoreo con autoridades del comité de emergencias regionales a fin de tomar las mejores decisiones asociadas al bienestar de los estudiantes de La Araucanía.