Las cirugías de vitreoretina son un procedimiento fundamental para tratar una variedad de trastornos oculares, incluyendo el desprendimiento de retina y lesiones traumáticas.
Sin embargo, como muchas otras cirugías electivas, fueron suspendidas temporalmente durante la pandemia de covid-19 para priorizar la atención médica urgente, dejando espacios de atención para pacientes con urgencias oftalmológicas retinales en un convenio con un prestador privado, que hasta ahora ha permitido realizar de manera habitual estas cirugías, pero no en el número y volumen necesario.
Según explicó Danko Araya, médico oftalmólogo del Hospital Regional de Temuco, especialista en retina y uveítis. “Estas cirugías no se realizaban en el hospital desde el año 2019 y durante los últimos meses trabajamos en conjunto con la dirección para poder lograr reactivar estas cirugías que nos vimos obligados a dejar en pausa. En la actualidad, tenemos muchos pacientes que están a la espera de cirugía, a pesar de que el hospital externaliza estas atenciones, pero hoy podremos hacerlas en nuestras dependencias lo que nos permitirá aumentar el número de intervenciones”, destacó el médico.
Por su parte el director del establecimiento, Heber Rickenberg, indicó que “el reinicio de las cirugías de vitreoretina en el hospital es una excelente noticia para la comunidad médica y los pacientes, y representa un paso importante hacia la recuperación de la atención médica durante y después de la pandemia de covid-19”.
PROCEDIMIENTO
La cirugía de vitreoretina es un procedimiento quirúrgico que se utiliza para tratar trastornos de la retina y la coroides del ojo (capa delgada de tejido que forma parte de la capa intermedia de la pared del ojo). Estos trastornos pueden incluir desprendimiento de retina, tracción vitreomacular, agujeros maculares, entre otros.
Es un procedimiento muy efectivo y puede ser crucial para mantener o mejorar la visión de los pacientes afectados por trastornos de retina. Para muchos pacientes, la cirugía puede prevenir una pérdida de visión adicional o incluso restaurar su visión.
Por ejemplo, en el caso del desprendimiento de retina, la cirugía de vitreoretina puede ayudar a evitar la pérdida permanente de la visión, ya que el desprendimiento de retina puede cortar el suministro de sangre y oxígeno a la retina, lo que lleva a una pérdida de visión progresiva e irreversible si no se trata. Además, los pacientes con otros trastornos de retina pueden experimentar una mejora significativa en su visión después de la cirugía.
Por ello la importancia de aumentar el número de cirugías que a juicio de Araya requieren ser resueltas de manera rápida. “Estamos operando a más pacientes que hace unas semanas y la idea es que en un mes este número se vea acrecentado, sumando más espacios, más pabellones que se transforman en mayor cantidad de cirugías para nuestros usuarios y la reducción significativa de la lista de espera en este tipo de cirugía que es de alta complejidad”, afirmó el facultativo.
Para el jefe de la Unidad de Oftalmología, Luis Navarro, es motivo de alegría reiniciar estas cirugías en el Hospital Hernán Henríquez. “Significa que volvemos a funcionar como servicio integral, ahora si dentro de las instalaciones de nuestro hospital”, afirmó, agregando que “existe una larga lista de espera de pacientes para estos procedimientos, y otros que, por la gravedad, deben ser resueltos en períodos muy cortos, como lo es el desprendimiento de retina”.
Ante eso, “contar con una mayor oferta de cirugías en este sentido, nos permite responder a esta necesidad de forma más adecuada, sin prolongar innecesariamente la espera para el tratamiento quirúrgico, mejorando así el pronóstico visual de los pacientes que sufren estas enfermedades”, puntualizó.