María Alejandra Vallejos, jefa de Carrera Técnico en Educación Especial del Centro de Formación Técnica Santo Tomás Temuco, comparte valiosas recomendaciones para hacer de las vacaciones de verano un tiempo de aprendizaje, creatividad y conexión familiar.
“Es tiempo de crear experiencias significativas”, afirma Vallejos. Desde estimular la imaginación en caminatas al aire libre hasta disfrutar de juegos tradicionales en familia, la experta ofrece consejos prácticos para padres ocupados que desean compartir momentos especiales con sus hijos.
Las ansiadas vacaciones han llegado, momentos anhelados no sólo por los niños, sino por toda la familia luego de un año con altibajos. Surge la interrogante: ¿cómo emplear sabiamente el tiempo con nuestros pequeños durante este período? ¿Cómo estimular su imaginación durante el verano? ¿Cuál es la mejor manera de desconectarse y pasar tiempo de calidad en familia? ¿Qué actividades son ideales para los niños en climas cálidos? Estas son algunas de las preguntas que actualmente están surgiendo en muchos hogares de nuestro país.
La profesional sugiere abordar estas vacaciones mediante la creación de rutinas que ofrezcan experiencias significativas y acordadas en común, lo que permitirá establecer un orden y sacar el máximo provecho del tiempo disponible. Para estimular la imaginación, propone realizar caminatas al aire libre en entornos cercanos, como plazas, parques y áreas verdes locales, o para aquellos con acceso, explorar espacios naturales más distantes. La meta principal es observar la naturaleza: se puede llevar una lupa para descubrir detalles que a simple vista pasan desapercibidos. Posteriormente, se puede animar a los niños a relatar sus descubrimientos, crear historias basadas en sus experiencias o emociones, e incluso plasmarlas a través de dibujos o pinturas utilizando diversas técnicas. De esta manera, cada caminata dejará un resultado concreto y enriquecedor.
En el caso de padres y familias con horarios complejos que no coinciden con las vacaciones de sus hijos, Vallejos sugiere aprovechar momentos cortos, pero de calidad. Por ejemplo, compartir momentos de merienda donde cocinar juntos, preparar helados caseros o disfrutar de una buena película. Asimismo, propone rescatar juegos tradicionales de la infancia, como “Tarrito de pintura”, “Saltar el lazo”, “Luche” o “El Tombo”, y aprovechar las tardes más largas y cálidas para jugar con agua, siempre dentro de las posibilidades disponibles. Durante los fines de semana, se insta a crear planes que involucren a todos y permitan disfrutar de la belleza natural del país, especialmente en el sur de Chile.
Para María Alejandra Vallejos, el tiempo que los niños pasan con su familia, ya sea largo o corto, debe ser de calidad. Estas experiencias significativas donde puedan reír, bailar, jugar, pintar y cantar quedarán grabadas en su memoria como momentos inolvidables.
“Es esencial que los momentos compartidos sean significativos, donde todos puedan reír, jugar y crear memorias inolvidables”, enfatiza. Estas experiencias, marcarán un impacto duradero en el desarrollo de los niños.
La experta concluye instando a las familias a enfocarse en la calidad del tiempo compartido durante estas vacaciones, aprovechando cada oportunidad para generar momentos memorables y fortalecer los lazos familiares.