La Tuna de la Universidad de La Frontera se prepara para celebrar sus 49 años de historia con un espectáculo musical gratuito que promete ser un panorama divertido y gratuito para Temuco y alrededores. El evento, que tendrá lugar el 23 de agosto a las 20.00 horas en la Sala Los Avellanos, ubicada en Francisco Salazar 1145, reunirá a distintas generaciones de tunos que han sido parte de esta emblemática agrupación desde su fundación en 1975.
Con casi medio siglo de tradición, la Tuna Ufro se ha consolidado como una de las más antiguas de Chile y Latinoamérica, destacándose por su espíritu de hermandad, trabajo en equipo y compañerismo. Esta agrupación estudiantil, surgida en la Universidad Católica de Temuco y que luego se integró a la Universidad de La Frontera en 1982, ha mantenido viva la esencia de las tunas universitarias, una tradición que ha trascendido fronteras y se ha extendido a lo largo del continente.
Javier Garrido, presidente de la Tuna Ufro, destacó el arduo trabajo de preparación para este concierto, que incluirá un repertorio cuidadosamente seleccionado para reflejar las vivencias y el espíritu de los tunos a lo largo de los años, además de un tema representativo del alma mater. “Hemos trabajado intensamente durante cinco meses, ensayando con estudiantes, miembros activos y egresados que alguna vez vistieron nuestras prendas”, señala Garrido.
El concierto será una antesala a la gran celebración del 50º aniversario de la tuna, que se realizará el próximo año, donde esperan conseguir el apoyo de las autoridades académicas para celebrarlo en el Aula Magna de la universidad. “Estamos muy emocionados y felices, determinados a entregar un gran concierto para el público”, afirma Garrido, subrayando la importancia de esta agrupación en la vida universitaria de Temuco y la región.
La Tuna de la Universidad de La Frontera no solo ha sido una parte esencial del movimiento de tunas y estudiantinas en la región, sino que también ha jugado un rol crucial en la preservación de las tradiciones universitarias. Según Garrido, la tuna ha contribuido significativamente al desarrollo personal y profesional de sus estudiantes, fomentando habilidades blandas como el liderazgo, el trabajo en equipo, el pensamiento crítico y la creatividad. “La tuna genera un fuerte sentido de pertenencia entre nuestros integrantes y hacia nuestra universidad, logrando mantener esta hermosa tradición estudiantil viva a través de la música, el viaje, el carisma y el ingenio”, concluye.