Este lunes a las 18:30 horas, el cuartel de la Segunda Compañía de Bomberos de Temuco fue escenario de una emotiva ceremonia religiosa en honor al bombero mártir Javier Ignacio Jara Saravia. Amigos, familiares, y una gran cantidad de personas llenaron el recinto y sus alrededores para despedirlo. Delegaciones de Cuerpos de Bomberos provenientes de diversas comunas de la región y de otras ciudades del país, incluyendo Santiago, se sumaron al homenaje, mostrando solidaridad con los camaradas de la capital de La Araucanía.
Después de la ceremonia, el cortejo fúnebre avanzó a pie hasta el Mausoleo del Cuerpo de Bomberos de Temuco, ubicado en la entrada principal del Cementerio General de la ciudad. En ese lugar, distintas personalidades brindaron palabras de consuelo a la familia y recordaron las virtudes de Javier, un joven bombero que falleció cumpliendo su labor al servicio de la comunidad.
Felipe Jara, hermano de Javier, expresó su agradecimiento por el homenaje brindado tanto por los Bomberos como por los miembros de la iglesia a la que pertenecía su hermano. Destacó que Javier amaba su trabajo y el servicio público, y pidió que lo recordaran como él era: un joven feliz y amistoso.
TRISTEZA
René Vargas, director de la Segunda Compañía, señaló que esta partida había dejado una profunda tristeza en la institución, recordando que desde hace 75 años no se registraba un mártir en sus filas, desde que Sócrates Leiva Cabezas cayó en acto de servicio el 7 de marzo de 1949. Vargas expresó que la partida de Javier fue especialmente dolorosa para sus compañeros, quienes compartían con él diariamente en reuniones, comidas, ejercicios y en la guardia nocturna.
En representación de la Junta Nacional de Cuerpos de Bomberos, el vicepresidente Luis Carmach expresó el pesar de la institución hacia el Cuerpo de Bomberos de Temuco y la familia de Javier, recordando su legado: “Javier fue un buen bombero, buen hijo y buen cristiano; por eso, descansa en paz”.
Finalmente, el Superintendente del Cuerpo de Bomberos de Temuco, Alfredo Lassalle, dedicó un mensaje de afecto y consuelo a los presentes: “Nos abruma el desconsuelo por tu tan pronta partida en acto de servicio. Siguiendo lo dispuesto en nuestro reglamento y por acuerdo del Directorio General, se te ha otorgado la condición de mártir del deber. Al depositar tus restos en nuestro mausoleo institucional, donde descansan nuestros mártires, honramos tu valor y entrega en esta noble misión. Nos despedimos de un joven alegre y generoso, quien concretó su sueño de ser bombero. Serán sus mejores recuerdos los que nos ayudarán a sobrellevar el dolor de tu partida”.
Así, entre lágrimas y aplausos, la comunidad de Temuco dio el último adiós a Javier Ignacio Jara Saravia, y todos quienes le conocieron coinciden en que se trata de un joven que deja una profunda huella en la historia de Bomberos de la región.