Cumpliendo la normativa establecida para construir refugios peatonales, recientemente se sumaron ocho modernos paraderos a la red rural de la comuna de Victoria y que reemplazaron a antiguas estructuras emplazadas en la ruta internacional, y en las localidades de Selva Oscura, Quino y Púa.
La iniciativa nació de la necesidad y de la carencia de poder tener un paradero funcional y adecuado para las condiciones climáticas de la zona, y que fue planteada por una mesa comunitaria de dirigentes de localidades rurales; a raíz de la cual Cmpc y la Municipalidad de Victoria, asumieron este compromiso.
Producto de la contingencia sanitaria, en la localidad de Selva Oscura se realizó una breve ceremonia, mediante la cual Cmpc entregó oficialmente los paraderos al edil de la comuna y a los vecinos.
Tras recibir los paraderos, Javier Jaramillo, alcalde de la comuna de Victoria, agradeció esta iniciativa. “Esta es una invitación a proyectar un diseño arquitectónico entre la ruta Victoria – Curacautín, así que bien contento, yo creo que esta es una alianza que nos ha permitido no solo avanzar en estas materias, sino que también en otros espacios y espero que sigamos vinculándonos, porque aquí los únicos que ganan, a mi juicio, es la comunidad”.
En tanto, en representación de la empresa, el subgerente de Asuntos Públicos de Cmpc Bosques, Ignacio Lira, subrayó la relevancia de esta iniciativa “Este es un aporte muy significativo que cambia el estándar de los clásicos paraderos y que genera un impacto positivo para la comunidad. Con este nuevo modelo, las personas podrán refugiarse y esperar la movilización en un paradero que posee un diseño atractivo y con identidad, que es funcional y que tiene criterios de sustentabilidad, ya que usa iluminación proveniente de la energía solar”.
DISEÑO CONJUNTO
Los nuevos paraderos son el resultado de un diseño arquitectónico “participativo”, que contempló los requerimientos de la comunidad y que ocupó elementos constructivos propios de la zona. Es así como en su estructura rectangular se utilizó madera de pino insigne, material protagonista que comparte espacio con un muro de bolones de piedra. En su interior, una gran banca de tablones se apoya en perfiles metálicos, permitiendo el descanso para los usuarios; este novedoso modelo incorporó además iluminación interior, alimentada por un panel solar.
Manuel González, presidente de la Junta de Vecinos de Selva Oscura, precisó la importancia que tiene para ellos contar con un refugio cuando se espera el transporte público. “Muy contento porque inauguramos estos paraderos que fueron un trabajo conjunto que tuvo largas reuniones, que concluyeron en un modelo, el que se construyó y concretó este año. Para nosotros como habitantes de Selva Oscura es algo muy bonito, bien sustentable y que va a ser de mucha utilidad para todos los vecinos y localidades”.