La ministra de Desarrollo Social y Familia, Karla Rubilar Barahona, y el director nacional de Conadi, Ignacio Malig Meza, entregaron tierras y títulos de dominio a la comunidad mapuche Lonco Segundo Camargo del sector Mallin del Treile, en Lonquimay, y firmaron las escrituras para la compra de tierras de la comunidad Antonio Chepo, del sector Malhuehue, comuna de Loncoche, las que en conjunto suman $6.174 millones invertidos en 994 hectáreas.
“Estamos muy emocionados de lo conseguido con estas dos comunidades, que por medio del diálogo, de manera pacífica y respetando todos los procesos, en conversación durante muchos años, hemos llegado a este día maravilloso, en el que se concreta este derecho de poder acceder una vez más a la tierra”, señaló Karla Rubilar, añadiendo que “estamos felices de ver esos rostros llenos de sonrisas. Rostros que probablemente antes habían llorado y hoy día ven este sueño cumplido, sobre todo pensando en los niños, niñas y adolescentes que van a tener el derecho a crecer en su propia tierra, cambiado la forma en que vivían. Esto probablemente es gracias a sus antepasados, a sus ancestros, algunos que se fueron en este camino y nos enorgullece haber contribuido con un granito de arena a que sea una realidad”.
El director nacional de Conadi, Ignacio Malig, señaló que “hemos tenido una tremenda jornada, de esas que llenan de satisfacción y que nos hacen ver que nuestro trabajo rinde frutos cuando uno lo hace con cariño, con dedicación y profesionalismo. En compañía de la ministra de Desarrollo Social y Familia, Karla Rubilar, y de la subsecretaria de Servicios Sociales, Andrea Balladares, hemos estado en la comuna de Loncoche, junto a la comunidad Antonio Chepo, firmando las escrituras de su compra de tierras, y luego nos trasladamos hasta acá, hasta este hermoso lugar, en donde a la comunidad Segundo Camargo le hemos entregado los títulos de dominio de su propiedad. Este es un importante compromiso que hemos cumplido y seguiremos trabajando en favor de las comunidades mapuches de la Región de La Araucanía”.
COMUNIDAD ANTONIO CHEPO
La comunidad Antonio Chepo, del sector Malhuehue, en Loncoche, actualmente está integrada por 49 socios que conforman 46 familias.
Los antecedentes de las tierras ancestrales de esta comunidad provienen del Título de Merced N° 1995, entregado al cacique Antonio Chepo y su comunidad en 1910 y la inversión que realizó Conadi para comprar estas tierras supera los $2.974 millones, con lo cual se adquirió para comunidad una superficie de 481.2 hectáreas, en Loncoche.
“Este es un gran logro que se debe al compromiso real de parte la autoridad, de la Ministra Karla Rubilar y de la Conadi, se tomaron esto con mucha con mucha responsabilidad y por eso estamos muy contentos. Nosotros queremos este predio para trabajar, queremos dar un ejemplo dentro de la comuna de Loncoche, porque somos trabajadores, vamos a ponerle todo el empeño y todas las ganas para trabajar unidos para sacarle producción a estas tierras acompañado por mis peñi y mis lamgen”, señaló Alfonso Chepo Calfío, lonco de la comunidad Antonio Chepo, de Loncoche.
COMUNIDAD LONKO SEGUNDO CAMARGO
La Comunidad Mapuche Lonko Segundo Camargo, del sector Mallin del Treile, en Lonquimay, cuenta con 29 socios que integran 27 familias. Sus tierras ancestrales provienen del Título de Merced N°1075, concedido al lonco Bernardo Ñanco y su comunidad en 1901. Para adquirir 513 hectáreas de tierras y los derechos de agua para esta comunidad se requirió una inversión de $3.200 millones.
“Estoy muy emocionada y agradecida de Dios y de las autoridades, feliz por nuestros socios y por la memoria de mi suegro, el lonco Segundo Camargo, un lonco tradicional”, señaló Dorca Huilipan Parra, secretaria de la comunidad indígena Lonco Segundo Camargo, agregando que “tenemos el sueño de trabajar esta tierra para salir de la extrema pobreza, el metro cuadrado en que vivíamos, nuestro sueño se hizo realidad, éramos temporeros pero ahora vamos a trabajar en nuestras propias tierras”.
Según destacó la Conadi, la adquisición para ambas comunidades se fundamenta en el artículo 20 letra B de la Ley 19.253 (Ley Indígena), que permite adquirir tierras provenientes de los títulos de merced, títulos de comisario u otras cesiones o asignaciones hechas por el Estado en favor de las personas y comunidades indígenas.