Más de 54 mil personas en Chile fueron diagnosticadas con cáncer el año 2021 por lo que se ha vuelto una de las patologías prevalentes con un alto impacto, no sólo en quien lo padece, sino también en su familia.
En este contexto el Hospital Dr. Hernán Henríquez Aravena de Temuco, determinó la construcción de nuevas dependencias para la Unidad de Quimioterapia Ambulatoria que fueron ubicadas en el segundo piso del establecimiento y que permitieron aumentar de 14 a 23 sillones la capacidad para dar tratamiento de quimioterapia a pacientes con patologías hemato-oncológicas, terapias especiales no oncológicas de la Ley Ricarte Soto, además de hormonoterapias y terapias de soporte.
Según el médico Patricio Yáñez, oncólogo y jefe de la Unidad de Quimioterapia Ambulatoria, contar con 23 sillones ha permitido prácticamente duplicar las prestaciones. “Estamos logrando cerca de 1.000 atenciones mensuales y, además de eso, el lugar es agradable. Estamos muy felices por nuestros pacientes que deben enfrentar esta dura enfermedad, Legar a un lugar con estas características alivia un poco su sufrimiento. Para nosotros esto representa un gran avance y es el resultado de varios años de esfuerzo”.
Soraya Sanzana Jara, enfermera supervisora del Centro de Responsabilidad Médico Adulto, recalcó que “este nuevo espacio permite dar cuidados de mejor calidad, una infraestructura mucho más amplia, con mayor equipamiento, que los funcionarios también tengan dependencias que son dignas para poder trabajar y por cierto entregar mayor seguridad a todas las terapias que aquí se realizan”.
Para Mónica Oettinger, enfermera supervisora del Servicio de Hemato-Oncología y referente técnico de la Unidad, “llegamos a la actualidad de esta Unidad dada la alta demanda de los pacientes oncológicos en nuestra región, que ha ido aumentando paulatinamente año a año. Siempre hubo estrategias institucionales para que pudiéramos abarcar a la población, pero en un espacio que no era apto. Así se empieza a impulsar este proyecto y finalmente el 2021 se puede concretar con estas nuevas dependencias”.
Con este cambio también se han visto beneficiados los pacientes que reciben terapias biológicas y dirigidas, entre otras. Para ello, se cuenta con un equipo multidisciplinario que trabaja con mucho compromiso, responsabilidad y con un trato humanizado.
Finalmente, Heber Rickenberg Torrejón, director del Hospital, afirmó que “se destinó un espacio que se utilizaba en tareas administrativas para un fin clínico. Es importante señalar que este cambio está asociado a una modernización del espacio, con lugares para la preparación de drogas antineoplásicas y donde se privilegia la comodidad de pacientes y funcionarios. Los usuarios tienen ahora un espacio individual donde pueden recibir su tratamiento de una manera digna, en espacios modernos que cuentan con estándares similares a los mejores a nivel mundial”.