Buzos de Bomberos y Carabineros que realizaban labores de rastreo en un pozo de áridos, situado en el callejón El Álamo de Labranza, descubrieron el cuerpo sin vida de un vecino que se encontraba desaparecido desde el pasado 24 de diciembre.
Héctor Mella, capitán de la Cuarta Compañía de Bomberos de Temuco, detalló que desde la víspera de Navidad no se tenía información sobre el paradero de esta persona. Durante la tarde del martes 26 de diciembre, la familia presentó una denuncia por presunta desgracia.
En la orilla del pozo, que ahora se ha convertido en una laguna, se encontraron las pertenencias del desaparecido, sugiriendo que podría haber estado bañándose en el lugar cuando ocurrió el hecho.
Ante esta situación, se convocaron a los buzos del Grupo de Rescate Subacuático (Gersa) de Bomberos de Temuco y del Grupo de Operaciones Policiales Especiales (Gope) de Carabineros. Simultáneamente, miembros de la Quinta y Décima compañías llevaron a cabo una búsqueda terrestre y con el apoyo de drones.
Los buzos de Gersa y del Gope de Carabineros se sumergieron en la laguna y, apenas unos minutos después de iniciar las operaciones, encontraron el cuerpo del vecino a aproximadamente dos metros de profundidad.
Según información preliminar, la víctima sería Víctor Apablaza Nahuelpi, de 38 años.
El oficial de Bomberos aclaró que la laguna en el callejón El Álamo de Labranza no guarda relación alguna con el río Cautín ni con los esteros de la zona. Su formación se debe a la extracción de áridos con fines comerciales en la zona norte de esta localidad.