La empresa temuquense “Rucantú” denunció haber sido injustamente acusada de la intoxicación de los niños de la Escuela Licanco, que colinda con la industria, y exigirá las reparaciones jurídicas correspondientes, luego que la Corte de Apelaciones y la Corte Suprema, rechazaran el Recurso de Protección que había interpuesto en su contra la Municipalidad de Padre Las Casas, sostenedora del establecimiento educacional.
Mario Sepúlveda, gerente de Administración y Finanzas de empresa “Rucantú”, señaló que “nuestra inocencia quedó plasmada en las sentencias de los máximos tribunales del país, ya que ninguna autoridad u organismo competente pudo demostrar que nuestra empresa fuera responsable de dichas intoxicaciones”.
Para Sepúlveda, lo más grave fue que, a su juicio, tanto el alcalde de Padre las Casas, como el seremi de Salud de la IX Región (entre otras autoridades) habrían culpado a la empresa de forma temeraria y sin absolutamente ningún informe técnico que establecería su responsabilidad en los hechos, a través de distintos medios de comunicación y redes sociales oficiales, generándoles un perjuicio irreparable en su imagen y también en el aspecto económico que, de paso, terminó afectando a un número importante de sus trabajadores.
Uno de los hechos más complejos e indignantes para empresa “Rucantú”, según manifestaron desde la firma, es que la recopilación de información arrojó que la única que presentaba irregularidades sanitarias al momento de las intoxicaciones era, precisamente, la Escuela Licanco, según lo establecen los informes del Servicio de Salud y la Unidad Hazmat de Bomberos.
GRAVES FALENCIAS
“Para ahondar más en la falsa acusación que sufrió la empresa Rucantú y que afectó severamente su imagen intachable por 40 años, basta decir -agregó Sepúlveda- que al momento de la fiscalización, tampoco se pudo verificar la existencia de Resolución de Autorización de Funcionamiento del sistema de aguas servidas de la propia escuela Licanco y que además habían varias otras falencias, entre ellas: que la fosa séptica del establecimiento educacional no contaba con cerco perimetral, que las ventilaciones se encontraban en mal estado y obstruidas y que el sistema de absorción no contaba con sello sanitario y tapa de inspección”.
“Lo que hace realmente impresentable todo lo ocurrido el 23 de abril del 2023 y los días posteriores, dijo Sepúlveda, es que todas estas irregularidades fueron completamente omitidas por parte del alcalde de Padre las Casas, señor Mario González y el seremi de Salud de la IX Región, señor Andrés Cuyul en todas las declaraciones que entregaron a los distintos medios de prensa y redes oficiales de dichas instituciones, comunidad educativa y opinión pública, culpándonos a nosotros de las intoxicaciones, lo que, como ha quedado demostrado, era absolutamente falso e injurioso”.
“No está demás decir, añadió, por último, que hasta se organizaron protestas en nuestra contra y que desconocidos intentaron quemar la empresa, por lo que exigimos que impere la verdad, al margen de todas las acciones legales que interpondremos y en las que nuestros abogados ya se encuentran trabajando”, concluyó.