La comuna de Nueva Imperial vibró al ritmo de la historia y la cultura en una jornada llena de actividades para celebrar el Día de los Patrimonios. La Municipalidad, a través de la Casa de la Cultura en conjunto con el Departamento de Turismo y Microempresa, organizó un programa diverso que cautivó a vecinos y visitantes de todas las edades.
Un viaje a través del tiempo se materializó en la Galería Fotográfica Patrimonial, donde los asistentes pudieron recorrer la historia visual de la comuna y la región, reviviendo momentos icónicos y conociendo el legado de sus antepasados. Para aquellos que buscaban una experiencia más inmersiva, el Tren Explorador se convirtió en un vehículo del tiempo, llevando a los pasajeros por un recorrido guiado por las principales estructuras patrimoniales y esculturas de la comuna. A lo largo del trayecto, un guía narraba las historias que se esconden detrás de cada edificio y obra de arte, transportando a los presentes a la época en que fueron creadas.
Una de las novedades más llamativas fue la presencia de las estatuas humanas que cobran vida, artistas callejeros que sorprendían a los transeúntes con sus representaciones estáticas de personajes históricos y figuras emblemáticas de la comuna. Sus performances interactivos y llenos de humor transformaron las calles de Nueva Imperial en un escenario vivo y vibrante.
Al interior del Centro Cultural, una colorida exposición de Artesanías Locales deleitó a los visitantes con la destreza y el talento de los artesanos locales. Juan José Gálvez, maestro en Platería Ancestral Mapuche, Laura Caniullán, artesana en Greda, Margot Curaqueo, especialista en Hierbas Medicinales, la Agrupación Wallontu-Witral con sus tejidos tradicionales, Jeannette Cayumán, artesana en Cuero, Zeferino Cheuquecoi, artesano en Platería Mapuche y Eva Muñoz, pintora en óleo, fueron solo algunos de los artistas que compartieron su saber hacer con el público.
Para finalizar la jornada, una exhibición de autos antiguos se tomó la plaza Pedro de Valdivia, llenando de nostalgia y admiración a los asistentes. Imponentes vehículos de otras épocas desfilaron por el centro de la ciudad, despertando la curiosidad de los más pequeños y transportando a los adultos a un viaje en el tiempo.
Por Israel Sanhueza.